El Ave María De Oro Ave
María, blanco lirio de la gloriosa
y siempre-serena Trinidad. Salve brillante Rosa del jardín
de los deleites celestiales:
¡O Vos, de quien Dios quiso
nacer en este mundo, y de cuya leche el Rey del Cielo
quiso ser nutrido!
¡Alimentad nuestras almas con las
efusiones de la Gracia Divina. Amén! "
A las almas que en vida me hayan saludado con esta oración, me apareceré
con gran resplandor en la hora de la muerte.
Además, cuando el alma se separe del cuerpo,
me manifestaré con hermosura tan espléndida,
que el alma sentirá un gran consuelo.
En ese instante, experimentará algo semejante a las delicias del Paraíso."
Palabras de la Santísima Virgen María a Santa Gertrudes
La Mayor. (De las Revelaciones, Tomo III, Capítulo XVIII)
María, blanco lirio de la gloriosa
y siempre-serena Trinidad. Salve brillante Rosa del jardín
de los deleites celestiales:
¡O Vos, de quien Dios quiso
nacer en este mundo, y de cuya leche el Rey del Cielo
quiso ser nutrido!
¡Alimentad nuestras almas con las
efusiones de la Gracia Divina. Amén! "
A las almas que en vida me hayan saludado con esta oración, me apareceré
con gran resplandor en la hora de la muerte.
Además, cuando el alma se separe del cuerpo,
me manifestaré con hermosura tan espléndida,
que el alma sentirá un gran consuelo.
En ese instante, experimentará algo semejante a las delicias del Paraíso."
Palabras de la Santísima Virgen María a Santa Gertrudes
La Mayor. (De las Revelaciones, Tomo III, Capítulo XVIII)