Mensaje, 25 de enero de 1989
“¡Queridos hijos! También hoy los invito al camino de la santidad. Oren para que puedan comprender la belleza de este camino en el que Dios se manifiesta a ustedes de manera especial. Oren, para que puedan estar abiertos a todo lo que Dios desea hacer a través de ustedes y para que puedan agradecer a Dios en sus vidas y regocijarse por todo lo que El hace por medio de cada uno de ustedes. Yo les doy mi bendición. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de febrero de 1989
“¡Queridos hijos! Hoy los invito a la oración con el corazón. Durante este tiempo de gracia Yo deseo que cada uno de ustedes esté unido con Jesús, pero sin la oración incesante ustedes no podrán experimentar la belleza y la grandeza de la gracia que Dios les ofrece. Por tanto, hijitos, en todo momento llenen sus corazones incluso con las más pequeas oraciones. Yo estoy con ustedes y velo incesantemente por cada corazón que se entrega a Mí. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de marzo de 1989
“¡Queridos hijos! Los invito a un abandono total a Dios. Los invito al gran regocijo y a la paz que sólo Dios da. Yo estoy con ustedes e intercedo cada día por ustedes ante Dios. Queridos hijitos, los invito a escucharme y a vivir los mensajes que Yo les doy desde hace ya varios aos. Todos ustedes están llamados a la santidad, pero ustedes todavía están lejos de ella. Yo les doy mi bendición. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de abril de 1989
“¡Queridos hijos! Los invito a entregarse completamente a Dios. Que todo lo que ustedes posean esté en manos de Dios, porque sólo así tendrán gozo en sus corazones. Queridos hijitos, regocíjense en todo lo que posean y den gracias a Dios porque todos es regalo de Dios para ustedes. De esta forma, en sus vidas, ustedes podrán dar gracias por todo y descubrir a Dios en todo, incluso en la flor más pequea. Ustedes experimentarán un gran gozo. Ustedes experimentarán a Dios. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de mayo de 1989
“¡Queridos hijos! Los invito a abrirse a Dios. Observen, hijitos, cómo la naturaleza se abre y da vida y frutos, de la misma manera Yo los invito a ustedes también a la vida con Dios y a entregarse completamente a El. Queridos hijos, Yo estoy con ustedes y quiero llevarlos incesantemente al gozo de la vida. Yo deseo que cadauno de ustedes descubra el gozo y el amor que sólo se encuentran en Dios y que sólo Dios puede dar. Dios no desea nada de ustedes sino su entrega. Por eso, queridos hijos, decídanse seriamente por Dios porque todo lo demás pasa! Sólo Dios no pasa. Oren para que descubran la grandeza y el gozo de la vida que Dios les concede. Gracias por haber respondido a mi llamado!”
Mensaje, 25 de junio de 1989
“¡Queridos hijos! Hoy los invito a vivir los mensajes que YO les he estado dando durante los últimos ocho aos. Este es el tiempo de la gracia y Yo deseo que la gracia de Dios sea grande para cada uno de ustedes. Yo los bendigo y los amo con un amor especial. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de julio de 1989
“¡Queridos hijos! Hoy los invito a renovar sus corazones. Abranse a Dios y entréguenle a El todas sus dificultades y cruces para que Dios pueda transformarlo todo en gozo. Hijitos, ustedes no pueden abrirse a Dios si no oran. Por eso, a partir de hoy, decídanse a consagrar una parte del día únicamente para encontrarse con Dios en el silencio. De esa manera, ustedes serán capaces, con Dios, de dar testimonio de mi presencia aquí. Hijitos, Yo no deseo obligarlos sino que libremente ustedes den su tiempo a Dios como hijos de Dios. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de agosto de 1989
“¡Queridos hijos! Los invito a la oración. Por medio de la oración, queridos hijos, ustedes obtienen gozo y paz. Por medio de la oración, ustedes son más ricos en la misericordia de Dios. Por eso, queridos hijos, que la oración sea la vida para cada uno de ustedes. Especialmente los invito a orar de tal forma que todos aquellos que están lejos de Dios puedan convertirse. Entonces, todos los corazones serán más ricos porque Dios reinará en el corazón de todos los hombres. Por eso, queridos hijos, oren, oren, oren! Que la oración comience a reinar en el mundo entero. Gracias por haber respondido a mi llamado!”
Mensaje, 25 de septiembre de 1989
“¡Queridos hijos! Hoy los invito a dar gracias a Dios por todos los dones que ustedes han descubierto en el curso de sus vidas e incluso por el don más pequeo que hayan percibido. Yo doy gracias con ustedes y deseo que todos ustedes experimenten el gozo de estos dones y deseo que Dios lo sea todo para cada uno de ustedes. Y entonces, queridos hijos, ustedes podrán crecer continuamente en el camino de la santidad. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de octubre de 1989
“¡Queridos hijos! Hoy también los invito a la oración. Yo siempre los estoy invitando, pero ustedes aún están muy lejos. Por eso, a partir de hoy, decídanse seriamente a dedicarle tiempo a Dios. Yo estoy con ustedes y deseo ensearles a orar con el corazón. En la oración con el corazón ustedes encontrarán a Dios. Por eso, hijitos, oren, oren, oren! Gracias por haber respondido a mi llamado!”
Mensaje, 25 de noviembre de 1989
“¡Queridos hijos! Desde hace aos Yo los invito por medio de los mensajes que les doy. Queridos hijitos, por medio de los mensajes, Yo quisiera realizar en sus corazones un hermoso mosaico, a fin de poder presentar a cada uno de ustedes a dios como una imagen original. Por eso, queridos hijitos, Yo deseo que sus decisiones sean libres delante de Dios, porque El les ha dado la libertad. Por eso, oren para que, sin ninguna influencia satánica, ustedes puedan decidirse únicamente por Dios. Yo oro por ustedes a Dios y pido su entrega a Dios. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”
Mensaje, 25 de diciembre de 1989
“¡Queridos hijos! Hoy los bendigo de una manera especial con mi bendición maternal e intercedo ante Dios por ustedes, para que El les conceda el regalo de la conversión del corazón. Desde hace aos, Yo los llamo y los exhorto a una vida espiritual profunda y a la simplicidad, pero ustedes son tan fríos. Por eso, queridos hijitos, tomen en serio los mensajes y vívanlos, para que su alma no se entristezca cuando Yo no esté ya más con ustedes y cuando ya no los guíe como a nios indecisos en sus primeros pasos. Por eso, queridos hijos, lean cada día los mensajes que Yo les he dado y transfórmenlos en vida. Yo los amo y por eso los invito a todos al camino de la salvación con Dios. Gracias por haber respondido a mi llamado! ”